La neonatología se ocupa de los bebés prematuros y los recién nacidos que tienen alguna enfermedad. Las causas más comunes por las que se necesitan cuidados neonatales pueden ser dificultades respiratorias transitorias, ictericia neonatal, hipoglucemia o infecciones. El tiempo de ingreso en neonatología podría variar de un par de días hasta algunos meses, dependiendo del momento del embarazo en el que el bebé nazca y la razón por la cual necesite cuidados especiales.
Alrededor del 10 % de todos los bebés recién nacidos recibe cuidados neonatológicos y en aproximadamente la mitad de los casos se trata de un nacimiento prematuro. Un bebé prematuro es el que nace antes de la semana 37+0. Los bebés que nacen entre la semana 35-36 pueden, por lo general, quedarse en la planta de maternidad bajo supervisión.
La neonatología se ha desarrollado muy rápido y el equipo de neonatología cuenta con un equipo de médicos y enfermeras especialistas en cuidados neonatales, y matronas o asistentes de enfermería. También tienen acceso a un equipo de consultores médicos tales como dietistas, fisioterapeutas, psicólogos y neurólogos especializados en neonatología. Con el mayor conocimiento con el que se cuenta en la actualidad y conscientes de la importancia de la presencia de los padres, una función básica del personal, además de ser expertos en medicina, es acompañar a los padres para involucrarlos activamente en el cuidado del bebé.
Incertidumbre…
Casi todos hemos escuchado hablar de los cuidados neonatológicos alguna vez, tener a tu bebé en neonatología por alguna complicación que no esperabas es un momento de mucha preocupación. Es común pensar: «¿Se pondrá bien?» «¿Sobrevivirá?» «¿Me atrevo a reforzar el vínculo entre nosotros?»”
Juntos
Los estudios demuestran que el contacto piel con piel y reforzar el vínculo de manera temprana no solo resulta importante para el lazo emocional entre los padres y el bebé, sino que también es positivo para el crecimiento y el neuro desarrollo de la criatura. Incluso juega un papel importante en una la lactancia exitosa. Es por esta razón que en los hospitales con cuidados neonatales los padres tienen acceso sin restricciones para ver a sus bebés y cuidar de ellos. Lo ideal sería que la madre y el bebé reciban los cuidados postparto en la misma sala de neonatología, pero esta no es la realidad en todos los hospitales. Si no es así, deberíais poder pedir el apoyo y cuidados de una matrona, y priorizar que en ningún momento se separe al bebé de la madre, puesto que es un derecho del niño hospitalizado estar acompañado en todo momento por su cuidador principal.
Volver a casa
Cuando el comienzo de la etapa como padres fue en neonatología y además la estancia fue prolongada, la mayoría de las familias suele esperar con anhelo la vuelta a casa. Los cuidados domiciliarios en la actualidad son parte de los cuidados que ofrece el sistema de salud relacionados con muchos hospitales y funcionan como una extensión de pediatría. Basado en las recomendaciones médicas se le ofrece a la familia continuar con los cuidados en casa hasta que el bebé haya madurado lo suficiente para poder ser dado de alta. Enfermeras con mucha experiencia en neonatología hacen visitas domiciliarias y dan consejos sobre lactancia, alimentación del bebé y cuidados del recién nacido. Infórmate sobre si tu hospital ofrece este servicio, y si no, pregunta qué alternativas te pueden ofrecer.
Fuente:
- Abascal, G., & Huss, M. S. (2018). Att föda. Bonnier Fakta.