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Fase de preparto o pródromos

La fase de preparto o pródromos es la fase en la que el cuerpo, y principalmente el útero y el cérvix, se prepara para dar a luz. El útero se relaja, se hace más fino y se dilata hasta los 3-4 cm. Es la fase más larga; podría durar horas e incluso días en algunos casos. Por lo general las contracciones no son muy intensas ni muy dolorosas, pueden variar en frecuencia siendo muy irregulares (5-20 minutos) y /o durar entre 10-45 segundos. El dolor se suele sentir en la espalda y se expande hacia las ingles. En esta fase es común que se expulse el tapón mucoso, aunque hay mujeres que no lo ven o no lo expulsan en esta fase; su aspecto es de flujo gelatinoso irrompible con hilitos de sangre.

Puesto que esta fase puede ser larga, es importante tomárselo con calma, ahorrar fuerzas y recargar energía. No tiene sentido intentar acelerar el proceso estando de pie o en movimiento, solamente resultará en más cansancio físico, mental y emocional. Intenta aislarte de lo que sucede alrededor, ten paciencia y ten clara la convicción que «mi cuerpo puede dar a luz a mi bebé».

Durante esta fase podría servirte de ayuda plantearte objetivos por etapas. Pensar ya en tener el bebé en tus brazos, no es útil porque falta mucho y puede ser agotador a nivel emocional. Sin embargo, podrías:

  • Descansar unas horas y aprovechar para dormir una siesta ahora que puedes. Después pensar en cómo te sientes y qué quisieras hacer en la próxima etapa.
  • Comer bien y tomar líquido para tener energía.
  • Tener a mano algún entretenimiento (música, una película, por ejemplo) que te ayude a pasar el rato y descansar si no logras quedarte dormida.
  • Darte una ducha relajante.

Poco a poco irás notando que las contracciones son cada vez más frecuentes y van aumentando en intensidad y dolor. Seguramente es el momento de contactar con el hospital o la clínica de maternidad para saber qué hacer. - Ejemplo del próximo objetivo: ir al hospital o la clínica de maternidad.

La pareja puede ayudar de muchas maneras diferentes en esta fase: ayudar a la mujer a encontrar una posición cómoda, darle masajes, decirle palabras alentadoras, y darle energía y algo de comer o beber, encargarse de los hijos mayores para que tenga tranquilidad y dejarla descansar… La mayoría de las mujeres se ponen extremadamente sensibles en esta etapa y necesitan mucho apoyo. Como pareja lo mejor es tener paciencia, estar a su lado y esperar.

En resumen, la fase de dilatación es la etapa en la que más te favorece estar tranquila. Prioriza el descanso, la hidratación y la nutrición para tener fuerzas e intentar, con paciencia, pasar ese tiempo lo mejor posible.

Fuente: - Abascal, G., & Huss, M. S. (2018). Att föda. Bonnier Fakta.