Existen diferentes tipos de gripe. Todas son causadas por un virus que se contagia por el aire, gotas y contacto con una superficie u objeto contaminado. Los hermanos mayores suelen contagiarse en la escuela infantil o en el colegio y traer la infección a casa. Los síntomas suelen ser fiebre alta, dolores corporales, tos seca, dolor de garganta, malestar general y dolores de cabeza.
Cuando estás embarazada, tienes mayor riesgo de enfermarte más gravemente, y la recomendación general desde el sistema público de salud es vacunarse, aunque la eficacia de la vacuna varía cada año, y cada madre tiene libertad de escoger si la considera necesaria y segura o no. El virus no puede pasar al bebé en el útero. Sin embargo, una madre infectada puede transmitir el virus al bebé después del nacimiento.
El sistema público de salud en las diversas comunidades autónomas españolas recomienda la vacuna antigripal solamente en la mujer embarazada cuando una posible infección suponga complicaciones que afecten gravemente la salud de la mujer o la del bebé. Por ejemplo, si la mujer embarazada tiene además alteraciones cardiovasculares o pulmonares crónicas, diabetes mellitus, disfunciones renales, anemia ferropénica patológica, asma, inmunosupresión, etc.…y especialmente si se ha requerido ingreso hospitalario o tratamiento médico en el último año. No se recomienda administrar la vacuna antigripal antes del segundo trimestre para minimizar posibles efectos teratrogénicos. Consúltalo con tu matrona o el profesional de la salud de tu confianza.
Fuente:
- CDC: Influenza