La oxitocina también es una hormona esencial durante la lactancia. Su principal función es permitir la eyección de la leche al contraer las células en los senos (células mioepiteliales) cuando el bebé comienza a succionar.
Mejora la producción de leche
La liberación de oxitocina durante la lactancia también ayuda al cuerpo a producir más prolactina, la hormona que produce leche, cuya acción es más frecuente durante la noche. Es importante tener esto en cuenta cuando el bebé se despierta durante la noche buscando leche, ya que, de hecho, aumenta la producción de leche.
Beneficios para la madre
La estimulación en los senos de la madre durante la lactancia aumenta la liberación de oxitocina, pero afecta a la mujer en otros aspectos, más que en la producción y eyección de leche. Puede experimentar una sensación de calma y comodidad, por lo que puede sentirse tan cansada que no podrá mantenerse despierta. La oxitocina también la hará más sensible a sonidos y disturbios. Si el bebé tiene hipo o gime repentinamente, una madre dormida pero con altos niveles de oxitocina en su cuerpo podrá despertarse mucho más fácil que una persona con niveles más bajos de la hormona. Un aumento en la liberación de oxitocina durante la lactancia también ayudará al útero a contraerse durante las primeras semanas siguientes al parto. Esta es una razón común de dolor en el útero durante la lactancia. Si el dolor es insoportable, se puede usar una almohadilla térmica, un dispositivo TENS o calmantes sin receta facultativa para tratar de aliviarlo.
Si no le das leche a tu bebé, el contacto piel con piel durante la alimentación puede ser beneficioso tanto para el bebé como para tu salud, gracias a la liberación de la oxitocina en sus cuerpos.
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Fuente:
- Myles, M.F., Marshall, J.E. & Raynor, M.D. (red.) (2014). Myles textbook for midwives. (16th edition). Edinburgh: Elsevier.