El deseo frecuente de orinar es normal y no tiene por qué ser síntoma de ninguna complicación. El motivo es el aumento de la producción de orina durante el embarazo y el aumento de tamaño del útero que oprime la vejiga.
El riesgo de contraer una infección urinaria es mayor durante el embarazo. Si no se trata podría derivar en contracciones tempranas y, en el peor de los casos, adelantar el proceso de parto. Por ello es importante que recibas el tratamiento adecuado en el caso de contraer una infección. Si sientes necesidad de orinar muy a menudo o si tienes picazón o dolor en la parte baja del vientre, ponte en contacto con tu matrona o tocólogo.
Fuente:
- Lärobok för barnmorskor. Faxelid, E. Course literature 2001.
- Myles Textbook for Midwives. Fraser, D. och Cooper, M. Churchill Livingstone 2003.